Goles Valencia 2 - Getafe 0

Un Getafe muy débil se lo puso en bandeja al Valencia para que comenzase su resurrección. Dos goles le bastaron al equipo de Emery para recobrar ánimos delante de su afición. Uno de ellos, el de Tino Costa, fue lo mejor de una noche que no pasará a la historia por su juego vistoso. El argentino se adueña poco a poco del mediocentro del Valencia y nadie echa de menos a Banega. Una pared con Mata la recogió Costa, controlando con el pecho y lanzando de volea un zurdazo a la escuadra. De nada sirvió la estirada de Codina y los planes de ambos conjuntos cambiaban tan sólo siete minutos después del comienzo del choque.
A partir de ahí Mata y Joaquín se animaron para combinar y crear ocasiones. Lástima para ellos que ni Aduriz ni Soldado tuviesen acierto de cara al gol. En el bando contrario sólo Parejo intentaba algo diferente. Su problema fue el mismo que el de sus rivales: el hombre en punta, Colunga, tampoco estaba fino. La oportunidad tras el robo de Parejo sobre Navarro, en semifalta, y su progresión sin oposición hasta que cedió para el asturiano fue un ejemplo de la poca fortuna durante la noche para el delantero.
La noche se le complicó al Valencia cuando Mathieu se tuvo que retirar lesionado, con un pinchazo y entró Jordi Alba. Con un gol de ventaja en el marcador, la capacidad defensiva del francés daba más confianza que la tremenda profundidad del joven lateral español. Entre la lesión y que el Valencia sabía a lo que jugaba, interrumpiendo mucho, el espectáculo se fue diluyendo y las ocasiones brillaron por su ausencia.
De esta manera, se llegó al descanso. Se esperaba un Getafe que saliese a darle la vuelta al encuentro. Pero la poca fuerza e intensidad de los madrileños permitieron que el duelo fuese controlado por el Valencia hasta convertirse en un monólogo. Sin necesidad de disparar demasiado, el Valencia encontró el gol que cerraba el encuentro. David Navarro aprovechó el centro con rosca en una falta para cabecear. Detuvo Codina pero el rechace le llegó al central que sólo tuvo que empujarla para poner el segundo en el electrónico.
El Getafe, que no había dado la impresión durante el choque de querer los tres puntos, desistió definitivamente tras esa acción cuando todavía restaban 27 minutos para el pitido final. Fue el Valencia quien quiso marcar el tercero que terminase de insuflar ánimos a un equipo en horas bajas. Se permitió incluso la entrada a Isco, canterano che que mostró desparpajo. Pudo estrenarse en liga con gol pero estuvo demasiado lento en el área, tras recibir de Soldado, y se encontró con el defensa. Acto seguido Joaquín vio como el palo rechazaba su disparo cruzado desde la derecha, tras un recorte.