Con todo ello, el Barcelona tan sólo necesitó 16 minutos para adelantarse en el marcador gracias a un potentísimo disparo por la escuadra derecha de Dani Alves que estuvo atento a un rechace de la defensa del Getafe.
Pocos minutos después llegó la jugada más polémica del partido, una falta sobre David Villa en el minuto 20 y que para muchos fue penalti. El árbitro no paró el juego y Messi tuvo una clara oportunidad que no llegó a materializarse.
El partido se fue al descanso con un resultado muy ajustado (1-0) que hacía buenas las estadísticas de los útlimos encuentros. Pero el Barcelona se puso las pilas dispuesto a amarrar el resultado y no sufrir ningún sobresalto. Así, a los cuatro minutos de la segudna parte llegó el segundo tanto: Bojan disparó con la izquierda a un centro de Messi. El balón entró raso junto al poste izquierdo.
Los cambios en el Getafe (Miku y Adrián Sardinero por Casquero y Arizmendi) no cambiaron el fútbol del Getafe que parecía haber perdido todas sus bazas para llegar a la portería de Víctor Valdés. Pero cuando todo el mundo daba el resultado por concluido llegó un remate de Manu (Getafe) a tres minutos del final y que trasladó el nerviosismo a la grada que acabó pidiendo la hora.
En definitiva, un encuentro soso en el que un Getafe desdibujado poco pudo hacer ante el Barcelona de Pep Guardiola, a pesar de la presión de los últimos cinco minutos, que mantiene la ventaja sobre el Real Madrid y mete presión a los blancos minutos antes de que arranque el derbi frente al Atlético de Madrid.
Ya en la grada, la crónica pasa por el recuerdo unánime y el aplauso de ánimo para el jugador de Eric Abidal al que se le detectó un tumor en el hígado y fue operado satisfactoriamente el pasado jueves.
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