"Estoy triste porque no me dejan trabajar y porque me tengo que despedir de gente amiga; y ya un poco aburrido por no poder entrenar. Ahora mismo tengo unas sensaciones malas. El presidente me llamó para decirme que me rescindían el contrato, y hasta aquí ha llegado mi relación con Osasuna", manifestó en la sala de prensa de Tajonar tras despedirse de los que han sido sus jugadores desde el pasado 14 de octubre de 2008.
Camacho reconoció su sorpresa por el desenlace. "No me lo esperaba, pero los entrenadores siempre estamos para apagar el fuego y para pagar el pato. Cuando vine, firme y también sabía que algún día me tendría que ir. Igual que cuando me hicieron una oferta para venir, acepté; ahora me han dicho que me tengo que marchar y tengo que acatarlo. Son decisiones de la Juntas Directivas y a nosotros no nos competen", señaló.
0 comentarios:
Publicar un comentario