Fue un encuentro que el conjunto madrileño no supo rematar después de dominarlo con facilidad. Quique Sánchez Flores jugó a ser equipo grande y dejó en el banquillo al Kun Agüero, a Raúl García y a Antonio López. Jugaron Diego Costa, Tiago y Filipe Luis. Y el Atlético mantuvo su nivel. Filipe Luis y Diego Costa se encargaron de advertirlo. Ellos solitos se inventaron el gol. Filipe penetró con la velocidad que le ha hecho escapar de la normalidad y el joven delantero remató desde cerca el mando madrileño.La desventaja rompió el sistema absolutamente defensivo planteado por José Aurelio Gay. El Zaragoza, colista, vino a mantener el punto inicial y el tanto le obligó a pensar en abrirse. El partido entró en una fase de «stand by». Los locales no remataron su clara superioridad y los maños no supieron como atacar sin dejar huecos. Sánchez Flores se preocupó. Su equipo se veía ganador y no sacaba la puntilla. Lla entrada del ex atlético Sinama-Pongolle en el Zaragoza avisó de las intenciones del cuadro zaragozano. El espectáculo de Muñiz terminó por revolucionar el duelo. Y Reyes, que cayó en la trampa, dejó a los locales con diez. El partido se ponía difícil para el conjunto madrileño.
De Gea sacó unas manos de oro a un disparo de Ponzio y Quique Sánchez Flores tuvo que recurrir a su reserva de oro. Agüero. Con diez, la entrada del Kun equilibró la situación. Su rapidez al contragolpe echó atrás a la zaga visitante. Una contra por piernas del argentino finalizó con un disparo alto. Godín tuvo que retirarse al intentar cortar un disparo y sufrió una lesión de rodilla que dejó a los locales con nueve durante unos minutos. El uruguayo volvió, cojo, al campo, para ayudar a mantener el 1-0. A pesar de todo, el conjunto madrileño pudo sujetar el marcador. Su victoria le ha colocado en puestos de Liga de Campeones.
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