El Bayern se movió bien en las transiciones defensa-ataque, especialmente por medio del japonés Usami, muy rápido en la banda. Un centro del nipón, rematado por Petersen, fue la primera aproximación del equipo de Heynckes, pero no la más clara. Usami, en el 39, dejó solo a Alaba ante Valdés y el meta azulgrana demostró su calidad en el uno contra uno. Justo después, en una de las pocas apariciones de Thiago Alcántara, el centrocampista azulgrana dio muestras de su clase. Un centro desde la izquierda de Jonathan Soriano fue rematado de cabeza a gol por Thiago (0-1, m.42), un futbolista que está en racha, porque ya marcó en el partido de ayer ante el Internacional de Porto Alegre.
Con el paso de los minutos, las inercias de los equipos cambiaron. Dio descanso Guardiola a buena parte de sus titulares y a la hora de juego, Heynckes fue dando entrada a buena parte de sus jugadores más determinantes: Schweinsteiger, Mario Gómez, Kroos o Müller. Así, el Bayern abandonó su apuesta por el músculo y puso más talento sobre el césped, pero al Barça le dio igual. Fiel a su manera de ver el fútbol, en cuanto Thiago tomó las riendas de la situación, ya sin Iniesta, los azulgrana volvieron a lucirse. Tras una buena intervención de Pinto, a remate de Boateng (m.74), los azulgrana enlazaron una buena jugada de ataque. Afellay desde la izquierda combinó con Thiago y tras una pared con el holandés, el centrocampista recibió en la frontal del área desde donde disparó con efecto y de manera espectacular para marcar el 0-2.
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